Desafortunadamente el odio racial está presente en algunos individuos de todas las culturas, y para mayor desgracia eso hace que algunos países como Alemania - que terminó su última guerra hace apenas medio siglo - sigan sufriendo el estigma que otros países les endilguen como racistas.
La buena noticia es que eso de que los alemanes son racistas es un mito, y el peor cuento es que sean así con los mexicanos. En realidad Alemania y México tienen vínculos históricos que a la gran mayoría de la gente le pasan desapercibidos (Alexander von Humboldt, por ejemplo).
En su enorme mayoría son personas muy educadas, corteses, amables, y en muchas ciudades te sorprenderá ver lo bien que te reciben al saber que vas de México a conocer su país y su gente.
Eso sí, te recomiendo aprender algunas palabras y frases útiles en Alemán, ya que siempre es un signo de cortesía muy bien recibido. Verás que no es difícil y te vas a divertir muchísimo.
Cierto: los alemanes no son tan parlanchines como la mayoría de la gente de América, pero cuando uno abre el corazón sabes que tienes un amigo para toda la vida.